La historia de Gisel, una jóven de 27 años de Honduras
Aquí les voy a contar sobre mi vida; Mi vida no fue tan fácil, lo que me acuerdo cuando tenía 7 años me diagnosticaron VIH, desde entonces comencé con mis tratamientos ya que mis padres fallecieron de esta enfermedad. Tuve que crecer huérfana.
Gracias a Dios me dio una tía que estuvo conmigo cada momento de mi vida, me apoyo en todo, mi abuela materna me discriminaba solo porque yo era VIH Positiva, hasta que un día decidí quitarme la vida, pero mi abuela paterna me rescato, me impidió hacerlo y desde ese día me llevan con psicóloga y pude vencer todo lo que me decía.
Le agradezco a Dios que llegó una doctora nueva al SAI, ella me dijo “Gisel aceptas que te hagamos un examen de VIH” y le dije que sí, ya que en mi expediente no existe un papel que diga que soy VIH Positiva, entonces se debe de hacer una para estar segura que lo tenga.
Al darme la orden para realizarme el examen, el resultado se lo mandaron a la doctora. Ya al tener el resultado la doctora me agendó una cita para el 28 de agosto del 2020.
Llega el día de la cita, 28 de agosto del 2020, atendieron a todos los pacientes que estaban esperando, y a mi me dejaron afuera esperando con angustia. Llegó el momento de mi turno para entrar a consulta con la doctora, me sentía muy nerviosa, la doctora me dio la noticia de que mis resultados del examen de VIH eran negativos, la misma doctora no sabía cómo explicarlo, puede ser un milagro. Al recibir esa noticia me puse a llorar de la alegría al tener un resultado de VIH negativo.
Durante 20 años estuve tomando medicamentos, estando sana. Este año 2021 cumplí un año sin tomar medicamentos y me he realizado los exámenes los cuales el resultado sigue siendo negativo.
Yo no discrimino a nadie con el virus, ya que yo pase 26 años por ese proceso, lo cual no se lo deseo a nadie.
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